5 consejos para despedirte de tu hijo sin que llore

Trabajar y cuidar de los hijos al mismo tiempo es un desafío que muchas madres enfrentan a diario. La decisión de regresar al trabajo después de la maternidad puede generar sentimientos de culpa y ansiedad en las madres, pero es importante recordar que ser una mujer trabajadora no significa descuidar a tus hijos. De hecho, puedes ser exitosa en tu carrera y seguir siendo una excelente madre al mismo tiempo. En este artículo, te brindaremos algunos consejos para enfrentar la separación con tus hijos de una manera más tranquila y positiva.

Consejos para que tu hijo/a no llore al despedirte

1. **Prepara juntos la rutina del día anterior**: Involucra a tu hijo en la preparación de la cena, el almuerzo, revisen las tareas escolares juntos, entre otras actividades. Esto ayudará a que tu hijo se sienta más conectado contigo y sepa que estás presente en su día a día.

2. **Sonríe al despedirte**: Evita mostrar caras tristes o preocupadas al despedirte. Recuerda que vas a trabajar y que al final del día volverás a casa feliz. Deja de lado la idea del abandono y despídete con una sonrisa.

3. **Despídete con amor**: Dale un beso grande a tu hijo/a y anímalo a disfrutar su día en lugar de enfocarte en lo mucho que lo extrañarás. Evita hacer un drama de la situación y transmite tranquilidad.

4. **No prolongues la despedida**: Una vez te despidas, es importante marcharte sin prolongar el momento. Si tu hijo se pone triste, prométele que lo llamarás en cuanto llegues al trabajo para comprobar que está bien y jugando.

5. **Utiliza la tecnología**: Aprovecha la tecnología para mantenerte en contacto con tu hijo durante el día. Puedes llamarlo, enviarle mensajes diciéndole cuánto lo quieres, compartir fotos o videos divertidos de tu día en el trabajo, entre otras cosas.

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Separarse de los hijos para ir a trabajar puede generar emociones intensas tanto en los niños como en las madres. Es normal sentir miedo, ansiedad, culpa y preocupación al separarte de tu hijo, pero es importante trabajar en estas emociones para que la separación sea menos angustiante para ambos. Recuerda que la separación es un proceso de adaptación que requiere tiempo y paciencia tanto para los hijos como para las madres. ¡Ánimo!

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