La disputa legal entre Angelina Jolie y Brad Pitt por la propiedad de la bodega Château Miraval, valuada en 500 millones de dólares, continúa generando controversia. A pesar de la venta de la participación de Jolie después de su separación en 2016, la actriz ha expresado su deseo de que Pitt retire la demanda en su contra y ponga fin a la confrontación legal.
La batalla legal en curso
El abogado de Angelina Jolie, Paul Murphy, ha declarado a la revista People que Brad Pitt ha intentado «castigar y controlar» a Jolie al exigir un acuerdo de confidencialidad más amplio que cubra su presunta mala conducta y abuso personal. Murphy ha explicado que la actriz busca terminar con la disputa para permitir que su familia pueda sanar. Por otro lado, Brad Pitt ha solicitado daños monetarios, honorarios legales y la anulación de la venta de la participación de Jolie en la bodega.
La lucha por la custodia de los hijos
En mayo, un fallo judicial ordenó a Jolie entregar ocho años de acuerdos de confidencialidad relacionados con la disputa sobre Château Miraval. La actriz debía presentar todos los documentos requeridos por Pitt, quien buscaba evidencia de los acuerdos firmados por Jolie. Esta situación ha sido un golpe para el equipo legal de Pitt, ya que el equipo de Jolie argumentó previamente que entregar estos documentos sería costoso, derrochador, irrazonable y abusivo.
Château Miraval: un símbolo del pasado
El Château Miraval, ubicado en el sur de Francia, es mucho más que una bodega de renombre. Fue el escenario de la boda de Jolie y Pitt en 2014, pero desde su separación se ha convertido en un punto de discordia entre ambos. A pesar de la atención mediática y la cuantiosa suma de dinero en juego, Jolie insiste en que es crucial finalizar la disputa para sanar a su familia y avanzar hacia una nueva etapa en sus vidas.
Una resolución esperada por todos
Mientras la batalla legal continúa, los seguidores de ambas estrellas esperan que se alcance una resolución que permita a Jolie y Pitt avanzar. Por ahora, Pitt está luchando por recuperar la relación con sus hijos, quienes parecen alejarse de él e incluso están eliminando su apellido. La resolución de este conflicto no solo afecta a las estrellas de Hollywood, sino también a sus seguidores y al público en general.
En conclusión, la disputa legal entre Angelina Jolie y Brad Pitt por Château Miraval es un tema complejo que ha capturado la atención del público. A medida que la batalla continúa, se espera que ambas partes puedan encontrar una solución que permita sanar a sus familias y seguir adelante en sus vidas.