Tu perro y tu recién nacido, ayúdalos a conocerse y amarse

¿Te preocupa cómo reaccionará tu perro cuando llegue tu bebé? La relación entre tu mascota y el nuevo miembro de la familia depende de cómo los presentes por primera vez y de cómo los enseñes a interactuar. En este artículo, te guiaremos paso a paso para que tu perro y tu recién nacido se adapten bien y ¡lleguen a amarse locamente!

Tu perro y tu bebé, una amistad inquebrantable

PRIMER PASO: Educación de la mascota

Es fundamental que tu perro acepte al bebé de forma natural. Algunos perros pueden adoptar un papel dominante en la familia, lo que podría representar un peligro para el bebé. Es necesario educarlos para que entiendan que no son los líderes. Aquí te dejamos algunas reglas que pueden ser de gran ayuda:

– Trátalo como corresponde a su especie: no debe comer de tu comida ni en el mismo lugar, evita que duerma en tu habitación o en tu cama.
– Acarícialo cuando tú lo decidas, no cuando él lo pida.
– Asígnale un lugar especial para que descanse y se aleje cuando lo desee, y respeta su espacio.

SEGUNDO PASO: Acostumbrar al perro al bebé

Es importante que tu mascota se acostumbre gradualmente a la presencia del bebé y reconozca que este es su amo, al igual que tú. Algunos consejos para lograrlo son:

– Prohíbe la entrada a la habitación que ocupará el bebé antes de su llegada.
– Dale una prenda usada del bebé para que se acostumbre a su olor mientras esté en el hospital.
– Permite que se acerque al niño, pero evita que lo toque con la boca o la nariz.
– No des muchos mimos al bebé delante de la mascota al principio.

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TERCER PASO: Vigilancia y prevención

Al principio, evita dejar a tu mascota sola con el niño para poder observar su comportamiento y corregirlo si es necesario. Procura no permitirle pasar por debajo del moisés o la cuna para evitar posibles accidentes. Siempre supervisa su interacción.

CUARTO PASO: Entrenando al bebé

Cuando el bebé comience a gatear, será el momento adecuado para enseñarle cómo convivir con el perro. Enséñale a respetar los espacios y objetos de la mascota, retirando el plato de comida después de cada comida. Además, inculca en tu hijo las siguientes reglas de convivencia:

– No tocar los juguetes del perro.
– No acercarse al plato de comida.
– No molestarlo si está durmiendo.

En resumen, la clave para lograr una convivencia armoniosa entre tu perro y tu recién nacido es la paciencia, la educación y la supervisión constante. ¡Ambos pueden llegar a convertirse en los mejores amigos!

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