En las manos del bebé, cualquier objeto sencillo adquiere una gran importancia. No es necesario recurrir a juguetes elaborados para entretener a un bebé. En casa, hay una variedad de objetos con los que se pueden estimular los sentidos del pequeño, y a menudo se convierten en sus juegos favoritos. Desde cacharros de cocina hasta cajas, revistas e incluso el cartón del papel higiénico, lo inesperado suele captar su atención. De hecho, a menudo prefieren la caja o el papel brillante que envuelve los regalos en lugar del regalo en sí.
Déjalo explorar y experimentar, siempre manteniéndolo bajo supervisión. Y recuerda que su lugar favorito para jugar es donde está su mamá.
1. ¡A triturar revistas!
Jugar con papeles estimula la motricidad fina: estrujar, aplastar, romper… Los dedos trabajan intensamente. Es importante tener cuidado de que no se los lleven a la boca.
2. Un proyecto arquitectónico
El bebé puede aprender mucho con las construcciones tradicionales. También se le puede enseñar a apilar vasos, a insertar un popote en un servilletero, entre otras actividades.
3. ¿Dónde ha ido?
El cartón del papel higiénico o el tubo del rollo de cocina son perfectos para explorar la gravedad y también pueden funcionar como un telescopio improvisado.
4. Yo también sé recoger
Llenar y vaciar es una de las actividades favoritas de los bebés. Para mantenerlos entretenidos, basta con darles una caja llena de objetos y otra vacía para que los trasladen de un lugar a otro.
5. «Esta es mamá y este, papá?»
Un álbum pequeño con fotos de la familia, incluyendo mamá, papá, hermanos, tíos o abuelos, puede ayudar al bebé a reconocerse a sí mismo y a sus seres queridos.
6. ¿A que no me ves?
A los bebés les encanta esconderse, y qué mejor lugar que una caja de cartón. Aunque apenas se les vea medio cuerpo, se sienten muy importantes al ocultarse.
7. ¡Música, maestro!
Para crear un instrumento musical casero, solo se necesita una botella de plástico y unos garbanzos. Una vez que el bebé pueda quitar el tapón, se puede idear otro juego para seguir entreteniéndolo.
Es fundamental recordar que los juguetes más simples y cotidianos pueden ser los más estimulantes y entretenidos para un bebé, siempre bajo la atenta supervisión de un adulto. ¡Aprovecha la creatividad y la curiosidad natural de tu pequeño para disfrutar juntos de actividades divertidas y educativas!