Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad de México, junto con su esposa, la abogada Cristina Pereyra, abrieron una cafetería llamada Café Los Cedros: Restaurante y pastelería en la primera década de los 2000. Este negocio ofrecía un menú que incluía huevos estrellados, chilaquiles con cecina, pasteles, entre otros platillos. Sin embargo, actualmente García Luna ha sido declarado culpable de delitos relacionados con el narcotráfico y sobornos en Estados Unidos, y deberá pagar una multa de 2.500 millones de dólares debido a un esquema de contratación ilegal en México.
El destino de Los Cedros de García Luna
En 2020, el restaurante Los Cedros fue asegurado por la Procuraduría General de la República como parte de las investigaciones en contra de Genaro García Luna por enriquecimiento ilícito. Posteriormente, la Unidad de Inteligencia Financiera investigó este establecimiento como parte de una presunta red de corrupción relacionada con García Luna. A pesar de que el restaurante cerró debido al caso del exsecretario de seguridad, en sus mejores momentos ofrecía desayunos variados a precios accesibles.
Costo de los alimentos en Los Cedros
Los Cedros contaba con un menú de desayunos con precios inferiores a 100 pesos. Algunos de los platillos que se podían disfrutar incluían huevos norteños, huevos rancheros, huevos charros, huevos campesinos, uñas de gato, omelette, nopal a la plancha con queso, enchiladas light, entre otros. Además, ofrecían paquetes de desayuno que incluían café, jugo o fruta de temporada a precios muy accesibles.
Ubicación de Los Cedros
La cafetería Los Cedros tenía dos sucursales, una en la Ciudad de México y otra en Cuernavaca. La primera sucursal estaba ubicada en la colonia Paseos del Sur, alcaldía Xochimilco, y fue registrada por Cristina Pereyra en el Instituto Mexicano de Propiedad Industrial en 2007. Esta sucursal contaba con dos pisos y un acabado lujoso, con capacidad para 80 personas. Por otro lado, la sucursal de Cuernavaca también ofrecía un ambiente acogedor con mesas de madera, gabinetes con sillones verdes y un área de juegos infantiles. Ambas sucursales se encuentran actualmente cerradas, con letreros de ‘Se vende’ y ‘Se renta’.