Finalmente se realizó la primera audiencia de divorcio entre Mauro Icardi y Wanda Nara, un acontecimiento que atrajo la atención de muchos. En medio de todo el revuelo, el mensaje de la modelo y conductora por sus hijas resaltó como un elemento fundamental en todo el proceso.
El impacto de las redes sociales en el divorcio de Mauro Icardi y Wanda Nara
Como si se tratara de un partido de fútbol, las redes sociales tomaron posturas bien definidas en este tema. Esto generó una serie de informaciones cruzadas sobre un proceso judicial que fue seguido minuto a minuto por varios periodistas que narraban su versión de lo sucedido.
Una vez finalizada la audiencia, estas informaciones se multiplicaron, pero también se sumó un elemento clave. Tanto Mauro Icardi como Wanda Nara empezaron a compartir historias e imágenes de lo ocurrido.
El futbolista Mauro Icardi fue el primero en compartir algo, dedicando dos historias a la causa: una imagen de Johnny Depp en solitario y un montaje en el que se lo ve junto al actor. «En un mes nos verán en un Lamborghini rosa, Johnny… I love it», escribió en referencia al vehículo con el que su ex pareja llegó a los tribunales.
Wanda Nara, por su parte, fue más expresiva. Compartió numerosas imágenes del acontecimiento, desde su llegada hasta fotos de los momentos previos con sus acompañantes. Incluso se atrevió a hacer un pequeño anuncio de su tienda en línea.
Entre todas esas publicaciones, una en particular destacó sobre las demás. En medio de la secuencia, Wanda Nara compartió una imagen de Francesca, una de sus hijas, junto a un emoticón de corazón y una carita emocionada. Luego, publicó otra imagen en la que se ve a las dos niñas acompañadas de Andrés y Zaira Nara.
Estas historias fueron interpretadas como una especie de burla hacia Mauro Icardi, quien suele criticar la exposición de sus hijas en las redes sociales. Esta situación prolongó aún más el historial de conflictos alrededor de la ex pareja.
Wanda Nara y Mauro Icardi enfrentan un divorcio tan escandaloso como mediático, en el que cada uno toma partido por un bando u otro. Un panorama que parece empeorar a medida que pasan los días y avanza el proceso legal.