En un reciente fallo judicial, se determinó que La Mona Jiménez deberá abonar una cuantiosa suma de dinero a Natalia Jiménez Rufino como compensación por no reconocerla como su hija. A pesar de tener conocimiento del embarazo de su madre, el cantante se negó rotundamente a aceptarla, según lo expuesto en el dictamen emitido durante el programa de televisión «A la tarde (América)».
### El resarcimiento económico a Natalia Jiménez Rufino
El juez a cargo del caso especificó que se acogía a la demanda presentada por Natalia Romina Jiménez Rufino contra Juan Carlos Jiménez Rufino, condenando a este último a pagar la suma de noventa y dos millones doscientos trece mil cuarenta pesos ($92.213.040), que incluye una compensación por daño moral de cuarenta millones trescientos catorce mil pesos ($40.314.000) y daño patrimonial por pérdida de oportunidad pasada de cincuenta y un millones ochocientos noventa y nueve mil cuarenta pesos ($51.899.040), más los intereses correspondientes.
### El futuro de Natalia como heredera legal de La Mona
Aunque aún quedan dos instancias de apelación pendientes, los abogados de Natalia consideran que será difícil revertir la situación, lo que implicaría que no solo cobraría la suma mencionada, sino que también se convertiría en la heredera legal del patrimonio de La Mona.
Durante una entrevista en el programa conducido por Karina Mazzocco, Natalia reveló que supo de su relación biológica con el cantante a los 8 años, cuando su abuela se lo confesó. A pesar de que recibió apoyo económico para sus estudios cuando era niña, La Mona nunca la reconoció como su hija.
### La lucha de Natalia por su reconocimiento
A finales de julio de 2021, la Justicia de la Provincia de Córdoba confirmó que Natalia Taddei era hija de Carlos “La Mona” Jiménez. A pesar de esta resolución, Natalia afirmó que su padre biológico seguía sin reconocerla y denunció amenazas provenientes del entorno del artista.
En una ocasión, al intentar ingresar a uno de los shows de La Mona con su entrada, fue impedida de hacerlo por alguien que le informó que no podía acceder. Esta situación evidencia las dificultades que Natalia ha enfrentado en su intento por ser reconocida como hija del reconocido cantante de cuarteto.
Durante una entrevista en «A la Tarde», Natalia compartió su experiencia al realizar la prueba de ADN en 2015, la cual confirmó su parentesco con La Mona. Tras obtener los resultados positivos, intentó acercarse al cantante, pero se vio confrontada con una propuesta de su abogado para reconocerla a cambio de renunciar a sus derechos, lo cual generó un conflicto entre ambas partes.
En resumen, la historia de Natalia Jiménez Rufino y su lucha por ser reconocida como hija de La Mona Jiménez es un ejemplo de las complejidades familiares y legales que pueden surgir en situaciones de este tipo. A través de este caso, se vislumbra la importancia de la verdad, la justicia y el respeto en las relaciones familiares, así como la necesidad de abordar estos conflictos de manera empática y equitativa para todas las partes involucradas.